¿Qué hacemos?

NUESTRA ACTIVIDAD

Lo que tratamos de hacer es preservar amazonia. Es distinto conservar que se refiere a mantener en buen estado algo que ya existe. No necesariamente implica una acción activa. Preservar se refiere a proteger algo de daños o alteraciones para que pueda seguir existiendo en el futuro. Se aplica a la naturaleza, especies animales o plantas. Todos sabemos que sin amazonia el planeta deja de existir, preservar Amazonia representa un esfuerzo gigantesco, ningún estado solo lo puede enfrentar.

La biodiversidad amazónica es enorme, con la densidad de especies más alta de la Tierra, pero sigue siendo poco conocida en muchos niveles.

La diversidad de organismos de la cuenca amazónica se encuentra entre las más altas de la Tierra (Bass et al. 2010). Aproximadamente el 10% de las especies de plantas y vertebrados del mundo están comprimidas en un área que corresponde a ca. 0,5% de la superficie total de la Tierra (Jetz et al. 2012; Tedesco et al. 2017; Ter Steege et al. 2020) alberga casi 30% de todas las especies de plantas vasculares (Raven et al. 2020), vertebrados (Jenkins et al. 2013; Reis et al. 2016) y artrópodos (Stork 2018) de la Tierra. Las dimensiones completas de la diversidad amazónica siguen estando muy subestimadas (da Silva et al.2005; Barrowclough et al. 2016; García-Robledo et al.2020).

Solo entre 1999 y 2015, se describieron muchas especies nuevas de plantas (1155 spp.), peces (468 spp.), anfibios (321 Spp.), reptiles (112 spp.), aves (79 spp.) y mamíferos (65 spp.) en toda la cuenca amazónica (WWF 2016). Se siguen describiendo especies amazónicas espectaculares. Incluyendo, por ejemplo, un nuevo mono tití en peligro crítico (Plecturocebus grovesi; Byrneet al. 2016), 15 nuevas especies de aves amazónicas descritas en una sola publicación (Whitney y Haft( 2013); 44 nuevas especies de salamandras sin pulmones Bolitoglossa que están a la espera de descripciones formales (Jaramillo et al. 2020), una nueva orquídea de vainilla distintiva y en Peligro Crítico (Vanilla denshikoira; Flanagan et al. 2018), y una nueva especie de pez en forma de gusano (Tarumania walkerae) que habita en la hojarasca húmeda en lo profundo de la selva tropical, y que representa una familia completamente nueva, los Tarumaniidae (de Pinna et al. 2018).

Hay más especies de árboles en una hectárea de selva amazónica que en toda Europa (Ter Steege et al. 2006). B. Números estimados de especies de linajes amazónicos seleccionados, incluyendo las plantas vasculares (Hubbell et al. 2008; Mittermeier et al. 2003; ima-gen de Roberts 1839), mariposas (Vieira y Höfer 2021; imagen de Hewitson 1856), mamíferos (Mittermeier et al. 2003; imagen de Jardine et al. 1840), anfibios y reptiles (Mittermeier et al. 2003; imagen de Jose Vieira / Tropical Herping), aves (Mittermeier et al. 2003; imagen de Gould 1852), y peces (Oberdorff et al. 2019, Jézéquel et al. 2020; imagen de Castelnau 1855). Nótese que el número de especies de peces corresponde a toda la cuenca, pero la mayoría (>95%) son de la cuenca baja (Albert et al. 2011, 2020; Dagosta y de Pinna 2020).

Puntos centrales

Veamos algunas dimensiones:

Esta selva amazónica es el bosque tropical más extenso del mundo. ​ Se considera que su extensión llega a los 7 000 000 km2, repartidos entre nueve países, de los cuales Brasil es propietario del 60%. ​ La Amazonia se destaca por ser una de las ecorregiones con mayor biodiversidad en el planeta. Además, la Amazonia contribuye a la regulación del ciclo de carbono y del cambio climático. Las anomalías que suceden en cuanto a aumento en la tasa de CO2 están en sincronía con periodos secos en grandes partes del Amazonas, por lo tanto, el Amazonas actúa como un medidor atmosférico global de CO2.

El 11 de noviembre de 2011, la selva amazónica fue declarada una de las siete maravillas naturales del mundo.